El clásico de George Orwell, 1984, llega en una nueva versión al escenario costarricense, y lo hace con una fuerza inquietante. Bajo la dirección de Carlos Salazar Zeledón, esta adaptación del Teatro Espressivo reinterpreta la icónica distopía desde la mirada del presente, donde la vigilancia digital, la manipulación de la información y la fragilidad de las libertades individuales no son ficción, sino parte del día a día.
El montaje, basado en la versión teatral de Paul Stebbings y Phil Smith, combina thriller político, drama romántico y reflexión filosófica. La historia sigue a Winston Smith, un funcionario que se atreve a desafiar al omnipresente Gran Hermano en un mundo donde incluso enamorarse puede ser un acto de rebelión. La propuesta escénica rehúye de una ambientación historicista y se convierte en un llamado a pensar críticamente en medio del ruido digital actual.
La puesta en escena apuesta por una experiencia visual intensa, con elementos de mecatrónica, videomapping y un diseño escenográfico que sumerge al público en un universo opresivo. El elenco está encabezado por Winston Washington como Winston Smith, acompañado por Francella Lizano, Ether Porras y otros actores que encarnan múltiples personajes del régimen totalitario de Oceanía.
Las funciones serán del 30 de mayo al 22 de junio, los viernes y sábados a las 8 p.m. y los domingos a las 6 p.m. Las entradas tienen un costo de ₡12.250 más IVA, con descuento para jóvenes entre 18 y 25 años. Además, habrá funciones para estudiantes y giras educativas como parte de los programas de extensión del teatro.
Con esta temporada, Espressivo no solo revive un clásico literario: lanza una advertencia artística sobre el mundo que habitamos. Porque hoy, más que nunca, 1984 no es un futuro lejano, sino un espejo incómodo de nuestro presente.
