La seguridad vial depende en gran parte de mantener los vehículos en condiciones óptimas, especialmente el sistema de frenos. Expertos recomiendan hacer revisiones periódicas para garantizar que este componente vital esté siempre funcionando al máximo. Según Hugo Martínez, Gerente Regional de Autopits, «la prevención es clave para una conducción segura y eficiente», y asegura que los conductores atentos a las condiciones de sus autos no solo mejoran su rendimiento, sino también su durabilidad.
Uno de los consejos más importantes es realizar revisiones del sistema de frenos cada 10,000 kilómetros. Además, es esencial mantener el nivel adecuado del líquido de frenos y cambiarlo al menos una vez al año o cada 20,000 kilómetros. Las pastillas de freno deben ser inspeccionadas regularmente y reemplazadas si su grosor es menor a 3-5 milímetros para asegurar su eficacia.
Por otro lado, se debe tener especial cuidado con las frenadas bruscas, que provocan un desgaste prematuro de las pastillas. Conducir de forma suave y anticiparse a las situaciones de tránsito es fundamental para prolongar la vida útil de los frenos. Mantener distancias seguras también es clave, ya que reduce la necesidad de frenar de golpe y disminuye el riesgo de accidentes.
Finalmente, se recomienda llevar a cabo un mantenimiento preventivo del sistema de frenos al menos una vez al año o cada 10,000 kilómetros. Esto no solo asegura una conducción más segura, sino que permite detectar problemas antes de que se conviertan en fallas graves.